Este recuerdo y muchos más quedan en la memoria, al compartir la amistad y sobre todo, el don del Señor en el Sacerdocio.
Ahora que has partido a la Casa del Padre, podras seguir dibujando y compartiendo con el Arquitecto del Universo, GRACIAS POR TU AMISTAD.
Felicidad en la eternidad Padre Jesús Manuel Melo.